sábado, 18 octubre 2025

Entre barro, sueños y tiza: así nació nuestro Gamo Diana

Eugenia Aparicio

Antes de que existiera nuestro colegio, antes incluso de que hubiera calles, parques o semáforos en el barrio, este lugar era puro campo. Un campo lleno de vida, con árboles, hierba y animales que pastaban cerca de un pequeño arroyo llamado Meaque.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Inicia sesión para desbloquearlo.

Reciente

Sepulcros blanqueados y cucarachas panteoneras

En verano visité el santuario gallego de San Andrés...

En María está nuestra historia

En María de Nazaret está nuestra historia, la historia...

Celebrar un aniversario

Estamos en el décimo aniversario de la Carta Encíclica...

Newsletter

spot_img

Otras historias

Mi maestra, mi maestro

Lo que es el maestro, es más importante que...

HISTORIA DE AMOR Y GENEROSIDAD

Esta de hoy, es una triste y admirable historia....

Una oración que se viste

Déjenme este espacio para que les comente una pequeña...

Icono, 125 alentando esperanza

Si les digo que la revista Icono cumple 125...

Gimnasia de misericordia

“Dios mío, dame paciencia… ¡pero ya!” El gag del...
spot_img

Sepulcros blanqueados y cucarachas panteoneras

En verano visité el santuario gallego de San Andrés de Teixido, al que “va de muerto (encarnado en animal) quien no fue de vivo”...

En María está nuestra historia

En María de Nazaret está nuestra historia, la historia de la Iglesia inmersa en la humanidad común. Encarnándose en ella, el Dios de la...